Un aspecto
importante en la película es el resentimiento que existe en realidad entre
Julio y Tenoch. Lo palpamos, por ejemplo, cuando Julio insulta a Julio
llamándolo “naco”. Según la RAE, naco significa indígena. En México la palabra
indígena está asociada con la pobreza y/o la ignorancia. Por lo tanto, para
Julio Tenoch es un pobre ignorante. En la película nunca se ve, pero en la
escena de la cena en la playa, Tenoch dice que Julio lo ha llamado “fresa” y
“acomplejado”. Sin embargo, este rencor es mucho más profundo de lo que
aparenta. Porque el rencor estriba de la clase social del otro: mientras Julio
resiente la riqueza seguramente corrupta de Tenoch, éste desprecia a Julio por
pertenecer a la clase media.
El
resentimiento entre clases sociales es fuerte. Éste es precisamente el caso de México
en Y tu mamá también; lo vemos cuando tanto Julio como Tenoch se confrontan por
las respectivas infidelidades de sus novias: mientras que Tenoch, alegoría de
la clase alta, cuestiona enojado, mas no violento a Julio, Julio sí es agresivo
y violento contra Tenoch, quien, mostrando de nuevo su temor hacia la fuerza de
la clase media, se esconde en el carro, sube la ventana y pone el seguro a la
puerta. Y la manera de sentirse superior a Julio, Tenoch lo insulta llamándolo
naco. A Julio no parece importarle este insulto, amenazando que “este naco te va
a partir toda tu madre”. Éste es un comentario político, económico y social, y
lo que Cuarón pretende decir es que ni una ni otra clase hace algo por el
mejoramiento de la sociedad en común. También hay que notar que esta
indiferencia por el país resulta que otros se aprovechen de él: los cerdos
destrozan el campamento simbolizan la clase baja de México, que, no teniendo
ningún control, destrozan a México. Tiene coherencia, ya que el narrador dice
que los cerdos fueron sacrificados y consumidos en una fiesta popular. Sin
embargo, no me gusta que se compare a la clase baja con cerdos. Los cerdos,
para mí, representan precisamente eso: cerdos pertenecientes a la clase baja
que pueden destrozar un campamento cuando las clases alta y media se encuentran
divirtiéndose y olvidan su país.
Otro
personaje que debemos analizar es el padre de Ana. Según el narrador, el padre
de Ana es un periodista convertido recientemente a la política, que trabaja
como director de logística en un Instituto de cultura y que se refiere a Tenoch
como “el junior”. Este apodo comunica la envidia que tienen los intelectuales
que aspiran a ocupar cargos políticos dentro del mundo cultural, a diferencia
de los políticos de abolengo.
Los padres
de las novias de Tenoch y Julio también son interesantes. La película abre con
una escena de sexo entre Tenoch y Julio y al terminar el narrador nos dice que
Tenoch ha pasado la noche en casa de su novia. Julio, por otra parte, sólo se
pudo quedar con Cecilia hasta la cena. En el caso de Tenoch sólo podemos
imaginar los pensamientos de la madre de Ana: profesora del Centro de Estudios
para Extranjeros, aprueba por conveniencia que su hija tenga una relación con
el hijo del sub-secretario de Estado. La madre de Cecilia, en cambio, califica
de inocente el noviazgo entre su hija y Julio, y su esposo no desea que la
relación entre ambos llegue demasiado lejos.
Un
personaje interesante en la película es la hermana de Julio, Manuela, “La
Boinas”. Con este personaje Cuarón de nuevo hace una crítica social. Manuela,
al igual que Julio, pertenece a la clase media; sin embargo, ambos son muy
diferentes. Julio y Tenoch, al principio de la película se encuentran en el
carro y Julio se queja de la manifestación:
Puta madre,
piche tráfico, carajo, seguro ahí anda la necia de La Boinas armando otro
desmadre en otra puta manifestación.
La Boinas,
nos dice el narrador, estudia Ciencias Políticas en la UNAM, llevará ropa y
víveres a Chiapas, y tiene un compromiso social: hace manifestaciones, que
beneficiarían de lograr su objetivo, a gente indiferente de la clase media,
como su hermano Julio. Sin embargo, Julio no hace nada por su clase ni por su
país; solamente se interesa por sí mismo. Incluso él lo deja implícito cuando,
en la escena de la playa en la noche, Tenoch le encara su materialismo,
llamándolo arribista, por resentir a Tenoch y aun así ir a las casas de este
último. Julio a esto responde lo siguiente:
¡A huevo!
Para agarrar un cachito de lo que se roba tu papá, cabrón.
Con esto
Cuarón parece decir que en la clase media hay gente comprometida con la
sociedad y los indiferentes y egoístas que califican los esfuerzos de los
comprometidos como “necios”. Julio es un personaje de clase media que está enfrascado únicamente en su
hedonismo.
Este
detalle también se conecta con la escena en la que un personaje de aspecto
campesino le regala un sombrero a Julio. Con este gesto, el personaje establece
la relación entre él mismo y Julio – ambos comparten el olvido y el desprecio
de la clase alta, simbolizada por Julio, a pesar de que Julio es, en palabras
de Tenoch, un arribista.
Por un
momento también en la escena de tráfico vemos la simpatía que tiene Tenoch por
la revolución y al mismo tiempo por el desprecio que siente por la gente de su
clase, gente adinerada. Cuando Julio se queja de la manifestación, Tenoch dice
que los manifestantes están en todo su derecho. Además, Julio llama “pendejo” a
Tenoch cuando éste dice que su padre le quiere quitar el carro por no querer
hacer área tres en la preparatoria, para luego estudiar economía. Julio, quien
tiene un carro viejo, ve el aspecto impráctico y absurdo de renunciar a un buen
carro, solamente por el también aspecto impráctico de estudiar literatura y ser
escritor. Tenoch a esto responde:
Me cagan
los economistas… Por mí todos esos ojetes se pueden ir a chingar a su pinche
madre
Tenoch, al
parecer, reniega cómodamente de su lugar de origen (su padre es seguramente
economista). Sin embargo, aprovecha su poder económico y las ventajas que le
ofrece ser hijo de un político importante.
Debemos
notar que, al final de la película, Tenoch abandona su sueño de ser escritor y
opta por tomar el rumbo de economista. Esto es importante porque devela el
conflicto interno que vive Tenoch: En la boda de su hermana, Tenoch conoce a
Jano, quien le dice que para ser escritor hay que “haber vivido y madurado la
vivencia”. El viaje y la noche con Julio es una vivencia; sin embargo, es una
vivencia que Tenoch no ha querido madurar, ya que le supone una vergüenza sus
inclinaciones homosexuales. Por esta razón, al final de la película, el
narrador nos dice que Tenoch, dos meses después de su rompimiento con Ana, comienza
una relación con su vecina. Iniciar tan rápidamente otra relación no es algo
extraño; sin embargo, según el narrador, a Julio le toma nueve meses comenzar a
salir con una chica de su clase de francés. Esto revela mucho de ambos
personajes, ya que, en la realidad mexicana, ser homosexual es lo peor que
puede ser un hombre: Para Tenoch, esto es aún más insoportable, ya que él es
rico, culto e hijo de un político: a Tenoch le pesa más la homosexualidad, al
parecer. Julio, por otra parte, es un chico de clase media que no tiene una
imagen de clase alta que cuidar; por lo tanto, él, durante nueve meses, digiere
su aventura con Tenoch y podemos ver que se siente cómodo y bien consigo mismo
de reconocer que tiene tendencias homosexuales. Ya que, al final de la
película, el narrador nos dice que ambos nunca volverán a verse; sin embargo,
esto parece ser debido a que Tenoch no quiere ver a Julio (Tenoch durante todo
el momento del café tiene los brazos cruzados, está tenso y nervioso, prueba de
que no se siente cómodo con su escondida homosexualidad). Julio, por otra
parte, desea renovar su amistad con Tenoch al preguntarle si se pueden ver
después: Nos hablamos, ¿no?
Otro
personaje interesante y clave en la película es “El Saba”. Aparece en tres
escenas y se le alude en varias ocasiones; sin embargo, juega un papel
importante porque representa la juventud de México en algunos aspectos. El Saba
experimenta con drogas y sexo colectivo y, al final de la película, nos enteramos
por Julio que se ha mudado a Real de Catorce. Esto es significativo y se
conecta con la sexualidad indómita de Julio y Tenoch. Ya que Real de Catorce es
un lugar de peregrinación en México y un lugar sagrado para la el pueblo
Wirrarika. Pienso que lo que Cuarón nos quiere decir con el destino de El Saba
es que la experimentación de las drogas y la experimentación sexual – ambas son
maneras de contactar la espiritualidad. No olvidemos que el acto sexual, en términos
psicoanalíticos, es una manera de regresar a la unidad con la madre antes de
nacer – una unidad que a la que también se le califica de sagrada. Por lo
tanto, que El Saba al final de la película se encuentre en Real de Catorce
implica que su búsqueda en las drogas y en el sexo resultó fútil, y que el siguiente
paso, para él, es el lugar místico y mágico de los Wirrarika, al cual se va
para buscar la cura para su hambre existencial. También hay que notar que el
aspecto espiritual de Real de Catorce es un aspecto autóctono de México – es
espiritualidad indígena y no católica; es decir, El Saba no se fue a un
peregrinaje hacia la Basílica de Guadalupe, sino a un lugar propio de la
cultura prehispánica. Este personaje bien puede ser un comentario de Cuarón
acerca de la importancia de rescatar la espiritualidad olvidada de las culturas
indígenas por encima de la católica.
Y tu mamá
también es una película acerca de orfandad. Tenoch, Julio, Luisa y Jano parecen
compartir el lazo de padres ausentes. El padre de Tenoch, además de corrupto,
es un político servicial con los más poderosos. Hay que recordar la manera tan
laudable con la que halaga al presidente en la boda:
Quiero
agradecerles a todos su amable presencia a esta humilde celebración, y en
especial al señor presidente de la república y a su encantadora esposa… a pesar
de la complicada agenda que todos sabemos tienen. Es, ciertamente, una muestra
de su enorme sencillez. Ante tan distinguida presencia…
Sin
embargo, el padre de Tenoch parece ser un padre ocupado solamente en su
carrera, razón por la cual es tan servicial con los más poderosos. Hay que
recordar que no acepta que su hijo estudie literatura – él quiere que estudie
economía. Podemos decir entonces que el padre de Tenoch es un padre ausente,
así como lo es el padre de Jano, el primo de Tenoch, el padre de Julio, quien
se fue de la casa cuando éste tenía cinco años, y los padres de Luisa, quienes
murieron cuando ella tenía diez años.
La madre de
Tenoch es un aspecto interesante. Ama de casa, sabemos que Silvia, la madre de
Tenoch, pasa la mayor parte del tiempo en cursos y prácticas esotéricas”. Sin
embargo, Tenoch no parece comprender a su madre; cuando ésta llega y los chicos
se encuentren fumando, Tenoch hace una cara de fastidio cuando su madre le pide
tirar el cigarro que está fumando. Tenoch no parece tener una buena relación
con su madre, quien se encuentra muy ocupada atendiendo cursos y prácticas
esotéricas. Hay que también tomar en cuenta su nombre, Silvia, proveniente del
latín, que significa “la que vive en los bosques”, lo cual describe su
personalidad: en simbología Jungiana, el bosque simboliza la mente; la madre de
Tenoch, al estar al pendiente de sus prácticas esotéricas, no sale de su mente
y por lo tanto no tiene una relación estrecha con Tenoch. Silvia solamente se
preocupa por la apariencia y el materialismo de los eventos sociales. En la
boda, después de que Julio y Tenoch le tiran la bebida a Jano, el primo de
Tenoch, la madre de Tenoch quiere que Jano se ponga otro traje: “no me hagas
esto”, le dice a Jano, y se lo lleva para que se cambie y se encuentre
presentable para cuando conozca al presidente.
Sin embargo, a pesar de que la madre de Tenoch parece estar interesada
en el aspecto espiritual y emocional, esto resulta falso, ya que al mantener
relaciones sexuales con Julio demuestra un aspecto físico necesitado de
atención, lo cual también comunica una relación pobre entre ella y su esposo,
quien, podemos imaginar, al ser un político poderoso, ha de tener amantes que
se ocupen de él.
El caso de
la madre de Julio es diferente: no se ocupada de prácticas esotéricas ni ha
muerto como en el caso de Luisa; aun así, sabemos que es secretaria de una
empresa transnacional y podemos asumir que está ocupada la mayor parte del
tiempo en el trabajo. Por lo tanto, podemos afirmar que Julio también tiene una
relación poco estrecha con su madre, como es el caso de Tenoch. Esto lo vemos
también en la escena post-coito entre Julio y Luisa. Luisa va en busca de
Tenoch, quien se encuentra muy resentido con Luisa. Ésta le pregunta qué
sucede, si finalmente su plan ha resultado con éxito – ambos se han acostado
con ella. Tenoch, aún molesto – más bien encaprichado – no sabe qué responder.
Esto demuestra que entre Tenoch y Julio, quien parece tener un mayor problema
con su figura materna es Tenoch. Ya que hay que recordar que, después de
terminar la relación sexual con Luisa, Tenoch grita “mamacita” dos veces.
Hay algunos
detalles que también develan las diferencias sexuales entre Tenoch y Julio. En
la escena del aeropuerto, en la despedida de sus novias, Ceci y Ana reaccionan
de distinta manera cuando se encuentran con los amigos de sus respectivos
novios. Ana, por una parte, parece estar muy contenta de ver a Julio: lo
abraza, lo besa y se le echa a los brazos. Tenoch y Ceci, por otra parte,
solamente se dan un beso simple (esto se alcanza a apreciar poco), mucho menos
afectivo que el de Julio y Ana. Hay que recordar también lo que se confiesan
ambos protagonistas al final de la película:
Tenoch: La
neta es que sí me cogí a la Ceci varias veces
Julio: Yo
también le he estado poniendo con la Ana un chingo
Aunque
ambos personajes se han acostado con la novio del otro, al parecer Julio ha
sido mejor amante, lo cual nos hace pensar en que su venganza contra la clase
alta ha sido más violenta que la venganza de Tenoch contra la clase alta –
tanto, que incluso se acostó con Silvia, la madre de Tenoch. Esto es el último triunfo, la última prueba del macho por parte de Julio.
La Boca del
Cielo es otro aspecto fascinante en la película. El nombre, desde luego, es
inventado por Julio y Tenoch, y alude al sexo femenino. No obstante, el lugar
existe, y ambos personajes parecen sorprendidos cuando se los dice Chuy, el
guía de turistas. Sin embargo, la manera en la que encuentran La Boca del Cielo
es fascinante. En la casa de El Saba, pidiendo direcciones para llegar a la
playa, El Saba les dice a los protagonistas lo siguiente:
Le dan a la
derecha… es pura terracería… le dan hasta la playa y ya
Después de
la pelea en la que Julio empuja a Luisa, el narrador dice que los tres están
perdidos y que, en un intento para que Luisa no se diera cuenta de la
situación, Julio gira a la derecha en un camino de terracería, justamente como
lo dice El Saba. Sin embargo, esto no es casualidad. El Saba, como ya hemos
visto, es un personaje místico: y que los protagonistas encuentren una playa
que creían que no existía es un aspecto también místico, que apunta hacia la naturaleza mística de los actos de los personajes; finalmente la playa, en términos arquetípicos, representa la libertad (libertad que alcanzan los tres personajes: Tenoch y Julio al poder finalmente develarse su sexualidad y Luisa al morir).